El jabón de sosa, el de toda la vida
Paseando hace unos días por los alrededores del bonito pueblo de Trujillo, me encontré con un antiguo lavadero. Tras unos minutos viendo la restauración que se había hecho del edificio me vino al pensamiento la labor que suponía el lavar y limpiar la ropa no hace tanto tiempo. También me vino a la mente el olor del jabón de sosa y recordé esa especie de piedras blancas que de pequeño veía en la pila que había en el patio de mi casa. En esta entrada vamos a recordaros como hacer el jabón de sosa, el jabón de siempre, por si os animais a hacerlo.
Para realizar la acción de lavar necesitamos tres ingredientes, lógicamente la ropa sucia, agua y el jabón. El agua por si misma no diluye la grasa y por ello es necesario el jabón, cuya composición permite eliminar las manchas de grasa. De eso ya se dieron cuanto los antiguos, pero no es nuestro objeto contaros la historia del jabón, lo que os queremos contar brevemente el como hacerlo. En casa seguimos haciéndolo como antaño, a base de aceite y sosa, paciencia y unas cuantas noches helando. Aquí os dejamos nuestra receta que es bien sencilla, tan solo necesitamos:
- Sosa caustica
- Aceite de oliva, si es usado ha de estar bien filtrado. También puede usarse aceite de oliva u orujo refinado, que es más económico.
- Agua
- Una paleta de madera
- Un barreño de plástico
- Un par de frías noches de invierno
En un recipiente de plástico se vierten 4,5 litros de agua y se añade 1 kg de sosa, la cual ha de disolverse removiendo la mezcla con la cuchara de palo. Una vez disuelta la sosa, la mezcla se deja enfriar unas 6 o 7 horas.
Hay que tener mucho cuidado en esta parte porque la mezcla de la sosa con el agua genera una reacción que expulsa calor y se pueden producir quemaduras si se toca la mezcla o nos salpica. Es necesario que durante todo el proceso se utilicen guantes de goma y además hay que tener mucho cuidado.
Sosa ya disuelta en agua y aceite, ingredientes necesarios para elaborar el jabón.
Una vez fría la sosa se van añadiendo en el barreño 4,5 litros de aceite de oliva poco a poco, sin dejar de dar vueltas con la paleta de madera, SIEMPRE EN LA MISMA DIRECCIÓN. Es necesario armarse de paciencia durante este proceso, ya que con unas cuantas vueltas no es suficiente. Para que el jabón ligue nos va a hacer falta una hora y media más o menos de vueltas continuadas. Cuando la mezcla se empiece a poner blanquecina y pesada (espesa) ya esta lista. Una vez terminado el proceso pasamos la mezcla a un molde (en casa ponemos un trapo de algodón encima del molde para que luego sea más fácil desmoldar la plancha de jabón y no se rompa) y la dejamos un par de noches o tres al raso hasta que se solidifique. Os mostramos unas fotografías con el resultado final.
Proceso de mezclado, en la fotografía de arriba la mezcla tras verter el aceite; en la fotografía de abajo tras un hora y media removiendo con la paleta de madera.
Como veis, conforme se va solidificando la mezcla, ésta se vuelve más blanquecina, y una vez ha endurecido ya se puede cortar. No os desesperéis si en la segunda noche aún no esta dura de verdad, esperad un par de noches más, ya que dependiendo del frío y la humedad del ambienten tarda más o menos en endurecerse. En todo caso el jabón resultante no se puede utilizar hasta pasados 40 días.
Planchas de jabón secándose y de jabón cortado en trozos. Antiguamente se cortaba con alambre.
Jabón listo para quitar manchas
Cuando se hace la mezcla se puede añadir alguna fragancia para que nose note el olor de la sosa. Recetas de jabón existen muchas, casi que en cada casa había una. Os hemos presentado la que nos gusta a nosotros que es una de la mas sencillas. Una vez que tenemos el jabón ya no tenemos excusa para no frotar y limpiar las manchas.
Pilas con su piedra inclinada para frotar la ropa en un antiguo lavadero
Tags:
costumbres
2 comentarios
Sres autores del blog: Estoy intentando reconstruir la historia de un pequeño pueblo conquense y he visto que ustedes tienen algunas fotos que me vendrían muy bien. Me gustaría pedirles que me dijeran si puedo hacer uso de ellas o qué condiciones piden para ello. Muchas gracias de antemano y felicitarles por su trabajo porque, como yo, soy un enamorado de las viejas tradiciones. Un saludo
ResponderEliminarPerdón, porque no he puesto mi nombre. Soy Pedro Villar
ResponderEliminar